miércoles, 18 de junio de 2008

Los mejores



El título 17 ha llegado. Y lo ha hecho tras un partido en que los Celtics pusieron en evidencia a los Lakers y demostraron el por qué eran los merecedores del título. Con un marcador absolutamente arrebatador (131-92), los Celtics vuelven a conseguir el anillo 22 años después del último triunfo.

Ante una afición absolutamente maravillosa que se ha caracterizado por tener un comportamiento admirable, con constantes cánticos de aliento, los Celtics fueron una apisonadora y su garra y ganas de ganar fueron los factores clave. Cuando en el primer cuarto Rajon Rondo robó el balón a Pau Gasol y condujo un contraataque voraz, ya se vio cual sería la imagen del encuentro. Los Lakers sucumbieron ante un ambiente desfavorable y no pudieron superar la agresividad de los verdes siendo víctimas de constantes pérdidas de balón y desacierto en el tiro. Ya en el descanso, la diferencia superaba los 20 puntos y en la segunda ya no hubo reacción ampliandose aún más la ventaja. Y es que no podía haberla porque ningún jugador angelino pudo sobreponerse. Gasol se hartó de perder balones y fallar, fue engullido por la marea verde. Y Bryant empezó muy bien pero después se estrelló contra el muro bostoniano.

Ray Allen estaba realizando un gran inicio de encuentro cuando en una entrada a canasta Lamar Odom le metió la mano en uno de sus ojos y tuvo que retirarse al vestuario. Volvió varios minutos después, con la ovación pertinente del público, y realizó un gran partido con 26 puntos. Los mismos que Kevin Garnett que añadió 14 rebotes a su espléndida actuación. realizó una serie de fadeaway que pasaran a la historia de las finales. Y Paul Pierce, elegido MVP de las finales, encestó 17 puntos supliendo su falta de acierto en el tiro con una lucha titánica y con un liderazgo indiscutible. Rondo consiguió también un magnífico partido, 21 puntos, 7 rebotes, y 8 asistencias. Excelente participación, una vez más, del banquillo. Ha sido un factor determinante en esta serie y en el partido final tuvieron un gran protagonismo James Posey (11 puntos), Eddie House (9 p), Leon Powe (8 p), y PJ Brown (6 p).

En las próximas horas y dias, seguiré aportando más cuestiones sobre este apasionante título que tanto ha emocionado a todos los célticos. Se recupera una gran tradición baloncestística y se encumbran jugadores como Pierce, Garnett, y Ray Allen, que eran grandes jugadores que no habían jugado nunca una final de la NBA y que ahora ya tienen el trofeo más deseado en el mundo baloncestístico. Paul Pierce decía hace algunos años que no le hacía gracia que su número fuera retirado sin haber aportado ningún campeonato de la NBA a las vitrinas célticas. Ahora ya lo tiene. Una nueva generación ha conseguido un entorchado y ha ampliado la magnífica historia de laureles verdes. Kevin Garnett, entrevistado al finalizar el partido por ESPN, gritaba absolutamente poseído "Anything is possible". Su emoción era tal que no podía verbalizar su alegría. Fueron momentos tan emocionantes que van a quedar grabados para siempre en nuestra memoria colectiva. Seguro que Red Auerbach, en el cielo, también está sonriendo con el título y probablemente estará fumando uno de sus famosos puros.

Campeones por 17ª vez

Desde siempre se ha sabido que los Boston Celtics cuentan con una de las mejores aficiones de la NBA. Que en temporadas en que el equipo haya conseguido 25, 30, o 35 victorias, se haya llenado el Banknorth Garden en múltiples ocasiones ya lo dice todo. Pero, lógicamente, cuando el equipo ha tirado para arriba la afición ha incrementado su ya de por sí gran sentimiento de pasión por los Celtics. A lo largo de esta temporada tan excepcional, la afición del Banknorth se ha convertido en un factor absolutamente decisivo a la hora de colaborar activamente a empujar a los verdes hacia delante y a intimidar a los equipos rivales. Después de una temporada regular con 66 victorias, todos los seguidores verdes encaramos el inicio de los playoffs con la gran esperanza de conseguir el título número 17. La fe nunca se perdió a pesar de sufrir reveses importantes en la primera serie ante Atlanta Hawks. La gente sabía que el equipo podía conseguirlo y se desgañitó para empujar al equipo ante las difíciles eliminatorias posteriores con Cleveland Cavaliers y Detroit Pistons.

Ya en la final, se recuperó el viejo grito de Beat LA que fue tan común en la década de los 80. Tras 21 años sin estar en una final, los partidos en el Garden han sido un auténtico infierno para los Lakers que han caído ante el empuje de un equipo y una afición que no concebía otro resultado que la victoria. La voracidad por conseguir el título de jugadores, técnicos, y afición es lo que ha desequilibrado este playoff final. Ya decían ayer los comentaristas de digital+, David Carnicero y Nicola Loncar, que el ambiente en todos los partidos había sido excepcional con un público animando constantemente a los suyos. Explicaron que había sido un privilegio vivir un ambientazo así y habían disfrutado también de los encantos de una ciudad que, según ellos, les había seducido.

Reconocimiento máximo, pues, para la afición de los Celtics, para los seguidores del equipo en la ciudad de Boston, en el estado de Massachussets, y en el resto del país. Pronto tendran la oportunidad de seguir con la fiesta en el desfile que llevará a jugadores y técnicos por toda la ciudad, y que va a movilizar a toda la urbe.

Reconocimiento también para los aficionados, entre los cuales me incluyo, de allende los mares. Para los múltiples seguidores de los Celtics en Europa, Asia, y Suramérica. No hemos podido estar en la cancha pero desde nuestros lugares de residencia hemos estado apoyando al equipo e impulsando, a nuestra manera, a difundir un mensaje de unidad y confianza ante los escépticos. Debemos disfrutar de este triunfo y ser conscientes que hacía casi una generación que no se podían vivir momentos como estos. Internet nos acerca, nos permite seguir acontecimientos y noticias, que antes sólo podríamos soñar y eso permite difundir más la pasión Céltica. Son momentos de gran alegría para nosotros y tenemos que disfrutar.

domingo, 15 de junio de 2008

Celtics Dancers


Todo es bueno en Boston...

viernes, 13 de junio de 2008

A un paso...del 17

Fue un partido épico para los Celtics. Fueron arrollados en el primer cuarto (35-14) y todo parecía indicar que sufrirían un auténtico calvario en el Staples. Más aún cuando se marcharon al descanso con 18 puntos de desventaja, sin haber podido borrar la imagen de ir al remolque. Pero en el vestuario las instrucciones de Doc Rivers y la reacción del grupo surtieron efecto recuperando la mejor defensa y consiguiendo situarse a 2 puntos de los Lakers faltando 6 minutos para la conclusión del tercer cuarto, 73-71 (tras un parcial de 31-15 favorable). Faltando 9 minutos para la conclusión, los verdes consiguieron empatar el encuentro, cosa que no se había producido desde un 2-2 al inicio del choque. En los 5 últimos minutos el parcial fue brutal, 21-3.

Es la remontada más grande en un partido de playoff final desde las series de 1971. La aportación del banquillo fue determinante representada en dos hombres, James Posey y Eddie House. Posey anotó 18 puntos (uno de sus 4 triples fue fundamental en la fase final)y como siempre su defensa fue impagable. Eddie House tuvo más minutos al estar Rajon Rondo renqueante. Encestó 11 puntos con 2 triples en momentos decisivos del tercer cuarto.

Paul Pierce consiguió 20 puntos y 7 asistencias y sus muestras de exaltación hacia el final del encuentro revelan, una vez más, el enorme espíritu y garra que ha transferido al equipo durante toda la temporada. Jugando en su hogar, ante sus amigos, está representando lo mejor de la esencia de los Celtics: lucha, entrega, y calidad.
Ray Allen estuvo también sensacional demostrando que cuando la ocasión lo ha requerido ha demostrado su enorme calidad. 19 puntos y 9 rebotes para él con una entrada a canasta, finalizando el partido, que será recordada en la historia de las finales de la NBA. Kevin Garnett volvió a ser imprescindible en el juego interior consiguiendo 16 puntos y 11 rebotes.

Los Lakers empezaron bien pero se acabaron estrellando ante la defensa de los verdes. 19 puntos para Lamar Odom, 17 para Bryant y Gasol, 13 de Fisher, y 10 de Radmanovic. Como ha sido habitual en las finales, poca aportación del banquillo.

Con esta victoria, los Celtics estan a sólo un triunfo más para alzar el ansiado título. El anillo está a tocar. El domingo nuevo enfrentamiento en el Staples. Una oportunidad para ganar en terreno ajeno o para demorar el alirón desde la perspectiva de los Lakers. Los Celtics deben culminar cuanto antes pero cuentan con la ventaja de volver a Boston el martes si no se consigue la victoria. Todas las cartas son favorables a los hombres de Doc Rivers y en palabras de Paul Pierce: "It's definitely a great win, one that you're going to put up there in the library and break back out one day for your kids to watch, but I want nothing more than that ring right now.''

Esta voluntad, esta fe en el triunfo, estas ganas de ganarlo, seguro que van a ser definitivas para conseguir el título. Ya nos acercamos, es el momento de conseguir un triunfo largamente esperado.

sábado, 7 de junio de 2008

1-0

Paul Pierce nos hizo recordar ayer la gesta de Willis Reed en las finales de 1970. En esa ocasión, el jugador franquicia de los New York Knicks volvió a la cancha tras haberse retirado con problemas en una rodilla. Su presencia fue fundamental para ganar a los Lakers de Wilt Chamberlain, Jerry West, y Elgin Baylor.

Faltando más de 6 minutos para el final del tercer cuarto, Pierce chocó con su compañero Kendrick Perkins y cayó fulminado al parquet doliendose de su rodilla. Se temió lo peor cuando Pierce necesitó la asistencia de sus compañeros para ser examinado en el vestuario. Pero sólo unos momentos después Pierce reapareció en la pista ante el delirio de la afición y el consuelo de Doc Rivers. Volvió al juego y anotó 11 de sus 22 puntos (convirtió 2 triples en 22 segundos) en este periodo siendo fundamental para asegurar la primera victoria en la final para los verdes.

El partido fue igualado y muy disputado con la tensión que se le supone a una final de la NBA. La defensa sobre Kobe Bryant fue fundamental al forzar al MVP de los Lakers a malas situaciones de juego que se tradujeron en un 9 de 26 en tiros. Consiguió 24 puntos pero no pudo catapultar a los suyos como en anteriores partidos. El parcial favorable de 15 puntos entre el tercer y último cuarto fue el que permitió conseguir la victoria a los Celtics en un Banknorth Garden abarrotado y con mucha más gente en diversos sitios de la ciudad de Boston siguiendo un evento que la ciudad de Massachussets llevaba demasiado tiempo sin vivir.

Kevin Garnett que hizo un emotivo signo de afirmación cuando vio que Pierce volvía al juego realizó una buena actuación con 24 puntos y 13 rebotes y, a pesar de fallar varios tiros seguidos en una fase determinada del partido, consiguió un mate en los últimos minutos que fue crucial para conseguir el triunfo. Ray Allen no consiguió un porcentaje muy bueno en tiro pero anotó 19 puntos y consiguió 8 rebotes. Luchó lo indecible y su esfuerzo fue encomiable al defender a Bryant durante gran parte del encuentro. Rajon Rondo colaboró también con 15 tantos y 7 asistencias mientras que Sam Cassell (el único jugador junto a James Posey que sabe lo que es jugar y ganar una final de la NBA) fue el más destacado del banquillo con 8 puntos en 13 minutos de juego.

Por parte de los hombres de Phil Jackson, noche aciaga. La defensa de los Celtics fue la de la regular season, la que les convirtió en el equipo mejor defensor de la liga. Los Californianos sufrieron ante la velocidad y la sagacidad de los verdes a la hora de luchar por cada balón y, aunque los Lakers consiguieron robar más balones y perder menos, la superioridad abrumadora en el rebote y un ligero mejor porcentaje de tiro determinaron la victoria. Además de Bryant, Pau Gasol trabajó mucho bajo tablero y consiguió 15 puntos y 8 rebotes aunque el dominio de Garnett siempre quedó claro en la zona. Lamar Odom consiguió 14 puntos y 6 rebotes y el base Derek Fisher logró 15 puntos y 6 asistencias. De todas formas, los jugadores de los Lakers no llegaron a sentirse suficientemente cómodos para desplegar su mejor juego y ahí radica el principal éxito de los verdes. La defensa va a ser, más que nunca, fundamental. De cara al segundo partido que se se disputará el domingo, seguro que Phil Jackson contraatacará con diferentes planteamientos que les permitan reconducirse. No en vano, el maestro Zen es el técnico con más victorias de la historia en playoff y se las sabe todas tras haber ganado 9 anillos de campeón como técnico (6 con los Bulls y 3 con los Lakers).

Para acabar, las palabras de Paul Pierce en las que explica cómo se sintió al abandonar el partido con su lesión de rodilla: "A lot was going though my head, it can't be over like this. I'm just glad I was able to get back out there.'' Por fortuna, el doctor McKeown, le confirmó que no sufría ninguna rotura sino una torsión. El jugador va a ser examinado más a fondo durante estos dias y se conocerá su situación exacta pero seguro que estará listo para seguir jugando porque ha luchado mucho para estar donde está y nada se lo va a impedir. Kendrick Perkins también sufrió una lesión, en este caso en el tobillo. Se espera que esten los dos a punto para el segundo encuentro.
Asistieron al partido personalidades de la política como el senador y ex-candidato presidencial, John Kerry, y el Gobernador de Massachussets, Deval Patrick. Se pudo ver a los actores Bruce Willis (acompañado por la modelo de lencería Emma Henning), Donnie Whalberg, Ellen Pompeo (ambos seguidores acérrimos de los Celtics), Leonardo Di Caprio y Mark Ruffalo (seguidores de los Lakers, se encuentran en Massachussets rodando el nuevo film de Martin Scorsese). También estaban el propietario de los Boston Red Sox, John Henry, y el linebacker de los New England Patriots, Teddy Bruschi. Ayer no compareció Tom Brady, como en otras ocasiones. Se dieron cita en el Garden grandes ex-jugadores como Bill Russell, Julius Erving, Kareem Abdul Jabbar, John Havlicek, Jo Jo White, KC Jones, Tom Heinsohn, y Cedric Maxwell (estos dos últimos son comentaristas de varios medios de TV).

jueves, 8 de mayo de 2008

76-72,caen los Cavs

LeBron James se enfiló hacia la canasta, con el callejón completamente despejado. El astro se elevó hacia la cesta, deslizó el balón hacia la punta de sus dedos... y falló.

Una y otra vez, James erró sus disparos en el último minuto, culminando uno de los peores partidos de su carrera y permitiendo que los Celtics de Boston derrotaran el martes por 76-72 a los Cavaliers de Cleveland, en el primer partido de la serie de cuartos de final de la NBA.

Kevin Garnett anotó 28 puntos para ser el único integrante del trío temible de Boston que tuvo una buena noche.

"Fue una pelea de pesos pesados, con muchos golpes al cuerpo", dijo Garnett. "No hubo boxeo fino, ni jabs, sólo una pelea defensiva de golpeo abajo".

Y en esa pelea, el astro de los Cavs perdió por decisión unánime.

James fue limitado a 12 puntos, resultado de apenas dos encestes en 18 disparos. El astro de los Cavs falló en tres coladas hacia la cesta y erró un triple en el último minuto.

"Fallé muchos disparos que sé que puedo meter", lamentó James, con la mirada incrédula en las estadísticas del encuentro, luego de anotar apenas dos puntos en la segunda mitad y de fallar sus seis últimos disparos del encuentro. "Fallé en saltos al pie de la cesta. He metido esos tiros durante toda mi vida".

El segundo partido de la serie se realizará el jueves por la noche, en Boston.

James anotó la primera canasta de Cleveland y falló los 10 tiros siguientes, antes de meterse hasta el pie de la cesta para depositar el balón adentro, con lo que redujo a 66-65 la ventaja de Boston, cuando restaban 5:34 minutos.

Luego, James falló sus últimos seis disparos, incluido uno que hubiera empatado el marcador, a 8,5 segundos del final. La estrella hizo apenas dos puntos en la segunda mitad, y totalizó nueve rebotes, el mismo número de asistencias y 10 balones perdidos.

Rajon Rondo anotó sus 15 puntos en la primera mitad, y Kendrick Perkins atrapó 12 rebotes, para los Celtics. Paul Pierce cometió dos faltas mientras marcaba a James, pero anotó apenas cuatro puntos, luego de dos encestes en 14 disparos. Ray Allen no anotó, fallando sus cuatro tiros.

Al menos, los Celtics recibieron el aporte de Garnett.

El lituano Zydrunas Ilgauskas sumó 22 puntos y 12 rebotes por los Cavs, que acertaron el 31% de sus tiros y no pudieron hacer un enceste en la última parte del encuentro.

Boston ganaba por 68-65 cuando Daniel Gibson acertó un triple que empató los cartones, a 3:18 minutos del final.

Ilgauskas anotó de un salto, tras un servicio de James, a 90 segundos de la chicharra. Luego, Garnett acertó un tiro para igualar a 70.

James dribló a Pierce y lanzó un tiro a la desesperada que no quedó siquiera cerca de entrar.

Sam Cassell acertó dos tiros libres para igualar a 72. James falló de nuevo, pero esta vez, Ilgauskas estaba ahí para meter el balón en el aro y empatar de nuevo el encuentro.

Garnett devolvió la ventaja a Boston y Cleveland pidió una pausa, a 22 segundos del timbrazo.

James eludió a los rivales, pero falló de nuevo, y James Posey recibió una falta antes de capturar el rebote. Acertó los dos tiros libres para liquidar a los Cavaliers.

Por los Cavs, el brasileño Anderson Varejao jugó 11:12 minutos, en los que sumó un punto, un rebote y una falta.

miércoles, 19 de marzo de 2008

94-74: Boston corta la racha de los Rockets

En menos de 24 horas, los Celtics de Boston, reivindicaron su condición de mejor equipo de la NBA después de ganar primero a los Spurs de San Antoni, actuales campeones de liga, y esta noche a los Rockets de Houston por paliza de 94-74, para romperles racha de 22 triunfos consecutivos.

Además de conseguir su tercer triunfo consecutivo y el decimotercero en los últimos 14 partidos disputados, dejaron su marca en 54-13, la mejor de la liga.

Los Rockets no habían perdido partido desde que cayeron derrotados por 97-89 ante los Jazz de Utah el pasado 27 de enero y se quedaron a 11 triunfos de empatar la mejor marca en la historia de la NB de triunfos consecutivos que la establecieron los Lakers de Los Angeles, la temporada de 1971-72 La combinación de los aleros Kevin Garnett y Paul Pierce, que aportaron 42 puntos, y los 21 del reserva Leon Powe, junto con una gran defensa, fueron los claves del triunfo de los Celtics.

Garnett dominó el juego por alto al conseguir 22 puntos con 11 rebotes, tres recuperaciones de balón y dos tapones, mientras que Pierce llegó a los 20 tantos y ambos jugadores consiguieron ocho anotaciones en el tercer periodo cuando se decidió el partido. Pero iba a ser Powe, la sorpresa del partido, el que desde el comienzo estableciese la diferencia en el juego y el marcador de los Celtics, al romper la defensa de los Rockets, que no encontraron respuesta a sus acciones y al concluir la primera parte era el máximo encestador con 13 tantos. Los Celtics, que jugaron su tercer partido consecutivo sin el escolta titular Ray Allen, lesionado, abrieron el camino del triunfo a partir del tercer periodo cuando lograron una racha de 11-3 y un parcial de 32-16, que iba a ser insuperable por el ataque inconsistente y poco efectivo de los Rockets, que tampoco hicieron su mejor defensa.

Esta vez, los Rockets si echaron en falta al pívot chino Yao Ming, especialmente, porque el escolta Tracy McGrady, su jugador franquicia, por segundo partido consecutivo estuvo no estuvo acertado en el ataque y tampoco el base Rafer Alston acertó con los triples. Sólo el alero novato argentino Luis Scola con 15 puntos y ocho rebotes mantuvo la consistencia en su juego para los Rockets, mientras que Alston y el reserva Michael Harris aportaron 12 tantos y el novato Aaron Brooks, en el tiempo de basura, llegó a los 10. Scola jugó 35 minutos para anotar 6 de 12 tiros de campo y 3-6 desde la línea de personal, recuperó un balón, lo perdió tres veces y cometió cuatro faltas personales. La gran frustración para los Rockets fueron los ocho puntos de McGrady, que anotó 4 de 11 tiros de campo, pero nunca pudo con el gran marcaje individual y de doble equipo que le hicieron los Celtics, como había sucedido en el partido anterior frente a los Lakers de Los Angeles. Los Rockets tampoco estuvieron afortunados en el control del balón al perderlo 16 por 11 de los Celtics, que capturaron 45 rebotes por 35 para los Rockets, que ahora se quedan con marca 46-21 para compartir el primer lugar con los Lakers, que ganaron 102-100 a los Mavericks de Dallas. La primera parte concluyó con empate a 40-40 y la figura y factor sorpresa para los Celtics iba a ser Powe, que lideró el ataque de los Celtics con 13 puntos, mientras que Pierce llegó a los 12 tantos. Faltaba por llegar el protagonismo y la aportación de Garnett, que reivindicó una vez más su clase y condición de jugador franquicia, mientras que McGrady no pudo hacer lo propio para los Rockets, que perdieron el primer partido de los 12 disputados sin Ming.

sábado, 8 de marzo de 2008

Celtics 90 Detroit 78

Con un gran juego de Kevin Garnett, quien con 31 puntos lidero la pizarra verde, los Boston Celtics vencieron a su rival directo en el Este, los Detroit Pistons, Garnett quien hacía mucho no mostraba su faceta tan anotadora no tuvo problemas para vulnerar la pintura de los de Michigan, Garnett además sumó 6 rebotes, 2 asistencias, 2 perdidas y 4 fouls en 41 minutos, siendo el Celtic que más tiempo estuvo en cancha, si bien Garnett fue la figura ofensiva del plantel, para mi la performance de Kedrick Perkins, opacó un tanto la de “El Cuervo”, ya que “Perk” dominó los tableros bajando la friolera de 20 rebotes (14 defensivos y 6 ofensivos), para poner un nuevo “doble-doble” en sus estadísticas, pues anotó 10 puntos en 32:55 en cancha, sin duda el Pívot está pasando un gran momento en esta temporada.
Rajon Rondo, colocó 16 puntos y 5 asistencias, un buen juego para el sophomore, Paul Pierce quien por fin jugó menos de 35 minutos puso 15 puntos y 5 asistencias, y Ray Allen se quedó solo en 3 puntos, aunque bajó 8 rebotes y dio 5 asistencias, una noche floja para el de Coney Island.

Por el lado de la visita, Chauncey Billups y Rasheed Wallece, lograron 23 puntos, el base además se dio maña de entregar 7 asistencias, Rip Hamilton, se quedó en 15 puntos, y Tayshaun Prince, bajó 10 rebotes para acompañar a sus 7 puntos.

Sam Cassell, el nuevo Base de los Celtics.

En otras noticias, los Celtics contrataron al veterano base Sam Cassell, quien se esta integrando al equipo, Cassell, quien ya compartió vestuario tanto con Ray Allen en los Bucks, como con KG en los T-Wolves, viene a traer su experiencia al equipo, ya que ha estado en finales de conferencia con Allen y Garnett, y claro con su anillo con los miticos Rockets de “The Dream” Olajuwon.

sábado, 4 de agosto de 2007

Garnett será la nueva estrella de los Celtics


El traspaso se ha convertido en el mayor de la historia de la NBA al recibir los Timberwolves a cinco jugadores y dos derechos de selección de la primera ronda en el sorteo universitario. Los Celtics se desprendieron de los aleros Al Jefferson, Ryan Gomes y Gerald Green; el base Sebastian Telfair y el pívot Theo Ratliff, que con 34 años es el único veterano.

La llegada de Garnett, ex Jugador Más Valioso (MVP) y 10 veces seleccionado para el Partido de las Estrellas, le da a la franquicia de Boston la gran oportunidad de volver a ser un equipo con aspiraciones al título de liga, algo que no han tenido por más de dos décadas.

Garnett se unirá al alero Paul Pierce y al escolta Ray Allen para formar un nuevo &lsquoBig Tree' con el que esperan recuperar su condición de equipo que ha ganado 16 títulos de liga, líderes en la historia de la NBA. "Me siento muy motivado de convertirme en jugador de los Celtics. Voy a tener una oportunidad única de tener como compañeros a profesionales de la clase de Paul y Ray, juntos en una organización con un legado y una tradición que nadie ha podido conseguir en la NBA".

El traspaso en el que más jugadores habían sido incluidos hasta ahora había sido de seis, cuando en la temporada de 1999, Scottie Pippen fue traspasado por los Trail Blazers de Portland a los Rockets de Houston.

Los Celtics no han podido ganar un nuevo título desde la temporada de 1986, cuando todavía jugaban en el equipo Larry Bird, Kevin McHale y Robert Parish.

McHale, que ahora es vicepresidente de operaciones de los Timberwolves, y Danny Ainge, gerente general de los Celtics, que también formaba parte del equipo campeón de 1986, han sido los que al final hicieron posible que Garnett accediese al traspaso.

Otros equipos como Phoenix, Golden State, Los Angeles Lakers y Dallas Mavericks habían mostrado su interés por conseguir los servicios del alero, que no pudo ver cumplido su sueño de hacer a los Timberwolves campeones de la NBA.

Garnett, de 31 años, ya llegó a un acuerdo de extensión de contrato por tres temporadas más con los Celtics, que le garantiza estar con ellos hasta la del 2011-12 al tener todavía dos más en el que firmó con los Timberwolves. Se estima que podrá cobrar más de 116 millones de dólares durante el tiempo que esté con los Celtics, que también tendrán que pagar algo de impuesto de lujo.

El conjunto de Boston habían querido a Garnett antes de que se celebrase el sorteo universitario el pasado junio, pero el jugador manifestó en público que no tenía interés en irse a Boston y su nuevo equipo tampoco quería poner en el traspaso al joven Jefferson. Sin embargo, el fichaje de Allen, de 32 años, y la presencia de su amigo Pierce, al final convencieron a Garnett de que en la Conferencia Este era donde iba a tener mayor oportunidad de conseguir un título y los Celtics volvieron a abrirle la puerta, esta vez para que entrase y se quedase.

Garnett, que se quedó con los Timberwolves a dos triunfos de las Finales de la NBA en la temporada del 2004, es el único jugador junto con Bird que ha logrado por cinco temporadas consecutivas promedios superiores a los 20 puntos, 10 rebotes y cinco asistencias.

El nuevo jugador de los Celtics, que lleva 12 años en la NBA, ha conseguido promedios de 20 puntos y 10 rebotes en cada una de las últimas nueve temporadas, para estar entre los cinco jugadores en la historia de la NBA que alcanzaron los 19.000 tantos, 10.000 rebotes y 4.000 asistencias. Los otros profesionales que lo consiguieron fueron Wilt Chamberlain, Kareem Abdul-Jabbar, Karl Malone y Charles Barkley. "Siento dejar una organización como la de los Timberwolves y a profesionales como Kevin para el que sólo tengo palabras de agradecimiento por todo el trabajo que ha hecho y lo que significa dentro del equipo. Ahora tengo por delante otra gran oportunidad para conseguir un anillo de campeón".

Por su parte, el copropietario de los Celtics, Wyc Grousbeck, dijo que todos dentro de la organización estaban felices después de haber conseguido el fichaje de Garnett y completar un trío de grandes estrellas. "Hemos logrado tres de los mejores talentos que hay en la NBA y eso es motivo de satisfacción y esperanza por parte de todos".

domingo, 1 de julio de 2007

Observaciones del draft

Transacción de impacto fue la que realizaron los Boston Celtics y los Seattle Supersonics. Boston envió a su selección número 5 (el alero de Georgetown, Jeff Green) a Seattle, junto el base Delonte West y al también alero Wally Szczerbiak. A cambio recibió al estelar escolta Ray Allen y al pívot de LSU, Glen Davis, selección número 35 de los Sonics. Con este cambio y con la posible salida vía la agencia libre de Rashard Lewis, los Sonics envían un mensaje inequívoco de que piensan reestructurar utilizando al novato Kevin Durant como el eje de la franquicia. Boston, por su parte, se convierte en un contendor inmediato al título del Este con la dupla de Allen y Paul Pierce, acompañados por dos jóvenes que ya comienzan a contribuir en grande en la línea frontal, Al Jefferson y Kendrick Perkins y por un base que defiende mucho y cada día aprende más sobre como llevar la ofensiva de un equipo, Rajan Rondo.

viernes, 15 de junio de 2007

82-83: Los Spurs, campeones

Ni "consagración" de LeBron James y mucho menos buen baloncesto fue lo que generaron las Finales de la NBA que han convertido a los Spurs de San Antonio nuevos campeones después de imponerse 83-82 a los Cavaliers de Cleveland en el cuarto partido y ganar por barrida de 4-0 la serie al mejor de siete.

Parker y Ginóbili, geniales

De nuevo el protagonismo del base francés Tony Parker, elegido como Jugador Más Valioso (MVP) de las Finales y las genialidades del escolta argentino Manu Ginóbili han sido las claves que han decidido el triunfo en el cuarto partido.

Parker, con 24 puntos (10 de 14, incluidos dos triples en tres intentos), siete rebotes y una asistencia, fue el jugador que mantuvo a los Spurs al frente del marcador hasta la recta final de los últimos cinco minutos que fue cuando surgió la figura de Ginóbili, lo mismo que sucedió en el tercer partido.

Pero Parker, con promedios de 24,5 puntos y 57 por ciento de acierto en los tiros de campo, fue seleccionado MVP, para convertirse en el primer francés que lo consigue en la historia de la NBA y un jugador europeo. "Es un sueño hecho realidad, pero todo los compañeros hicieron un gran trabajo y logramos el gran objetivo de ganar el título", declaró Parker, que recibió también el abrazo y el beso de su prometido la actriz de televisión Eva Longoria en la mitad del campo al concluir el partido.

Antes, Ginóbili fue la gran figura que surgió en los últimos cinco minutos del cuarto periodo para anotar 13 puntos, de los 27 con los que concluyó el partido, mientras que su compatriota Fabricio Oberto también iba a ser factor con cinco tantos. Ambos jugadores argentinos fueron los rompieron el marcador cuando se encontraba empatado a 66-66 y menos de seis minutos para que concluyese el partido.

Ginóbili surgió con un triple demoledor para el 69-66 y le siguió Oberto con jugada de tres puntos, canastas y personal, nueva canasta que incremento la ventaja de los Spurs a ocho tantos decisivos (74-66). James consiguió un triple para el 74-69, pero de nuevo Ginóbili logró otra canasta que mantuvo la ventaja en siete punto, imposibles de superar en los últimos segundos por los Cavaliers.

Cuarto título

Los Spurs iban a ganar un partido después de haber estado más de cinco minutos sin conseguir un sólo punto al comienzo del cuarto periodo con una racha de 11-0 para los Cavaliers.

Pero lo único que importaba al final era el triunfo y concluir las peores Finales en la historia de la NBA que dejaron a los Spurs con el cuarto título de campeones desde la temporada de 1999, a pesar que su jugador estrella, el alero Tim Duncan, se quedase con sólo 12 puntos (4 de 15 tiros de campo y 4 de 10 desde la línea de personal), capturase 15 rebotes y perdiese seis balones.

Duncan, que en las tres Finales anteriores ganadas por los Spurs había sido el ganador del premio MVP, esta vez se limitó a ayudar a su equipo, que ante la poca calidad del rival no necesito del máximo de su esfuerzo.

Los Spurs, que ya saben lo que es ganar un título devaluado, lo fue su primero de 1999 cuando la temporada estuvo reducida por la huelga que protagonizaron los jugadores, también lo consiguieron en el 2003 y 2005.

Sólo otros tres equipos en la historia de la NBA han logrado cuatro o más títulos de liga y estos han sido las dinastías de los Celtics de Boston, Los Angeles Lakers y los Bulls de Chicago.

El entrenador de los Spurs, Gregg Popovich, que tiene 4 de 4 en las Finales de la NBA, dijo que no debían ser considerados como una dinastía, pero los títulos así se lo acreditan, aunque su juego y rival, en el caso de los Cavaliers, sea más que cuestionado.

Mientras que el veterano alero Robert Horry, el jugador que hizo posible que los Spurs eliminasen a los Suns de Phoenix, al protagonizar el incidente que costó la suspensión del pívot Amare Stoudemire y el francés Boris Diaw para el decisivo quinto partido de la serie, se convirtió en el octavo profesional que ha logrado siete anillos de campeón.

Horri consiguió los dos primeros con los Rockets de Houston, tres con los Lakers de Shaquille O'Neal y Kobe Bryant, y ya lleva dos con los Spurs. "Pienso jugar un año más y repetir el título con los Spurs", declaró Horry al concluir el partido, algo que podrán conseguir si el nivel de calidad que se da entre los equipos de la Conferencia Este no mejora de cara a la próxima temporada.

Finales decepcionantes

De hecho, ya se habla de crisis grave que han dejado las Finales de la NBA, ante la desigualdad que se da entre los equipos de la Conferencia Oeste y los del Este. Ni James, que era la esperanza para los Cavaliers en sus primeras Finales desde que llegaron a la liga hace 37 años y para los directivos de la NBA, pudo no sólo elevar el nivel de la competición sino no convertirla en la menos vista de toda su historia.

La estrella de los Cavaliers, a quien ya habían "coronado" anticipadamente como el nuevo Michael Jordan de la NBA, volvió a fallar en los momentos decisivos del partido y sus 24 puntos, 10 asistencias y seis rebotes no le sirvieron para nada al equipo. Especialmente, porque falló 10 de 30 tiros de campo y volvió a perder seis balones, incluido uno cuando faltaban menos de dos minutos para concluir el partido y el marcador señalaba una ventaja de tres puntos para los Spurs.

Si James no fue factor, a pesar de todos los favores que le hicieron los árbitros con sus penetraciones a canasta, que la mayoría era falta personal, el resto de sus compañeros lo hicieron peor como lo demuestra el 36 por ciento de acierto en los tiros de campo, una estadística que explica la barrida del 4-0.

jueves, 14 de junio de 2007

El linense Sergio Sánchez será el primer andaluz en probar con un equipo de la NBA


















La NBA ha puesto definitivamente la vista en España y, pro primera vez, en un jugador andaluz. Los Boston Celtics, el club más laureado de la historia del baloncesto americano, han convocado al base de 1,89 metros Sergio Sánchez, nacido en la Línea de la Concepción (Cádiz) el 1 de marzo de 1981, jugador del MMT Estudiantes, y ex del UDEA Algeciras, Caja San Fernando, CB Huelva y Alta Gestión Fuenlabrada, para que tome parte en la Liga de Verano de Las Vegas, que se disputará en la capital de Nevada (EE UU) a partir del 2 de julio.
No obstante, el ofrecimiento del club de Boston no garantiza que el el linense vaya a competir en la NBA el próximo curso. Los Celtics, que cuentan con una plantilla en plena reconstrucción, quieren estudiar de cerca el juego de Sánchez para estudiar su incorporación, en la que asumiría un rol similar al de José Manuel Calderón en los Raptors. De momento, Sánchez cuenta con la ventaja del beneplácito del director de operaciones de los Celtics, el ex jugador Danny Ainge. “Sergio va a ser un terrorífico jugador de NBA”, indicó el directivo celtic al Boston Herald la pasada semana.

De esta manera, la carrera de Sergio Sánchez alcanza un punto que, hasta hace apenas un par de años, parecía lejano. El director de juego del Estudiantes, tras militar en la EBA y en la LEB desde 2001 a 2005 (siempre en clubes andaluces: el filial del Caja San Fernando y el CB Huelva), se incorporó al club madrileño en verano de 2005. Estudiantes le cedió al Alta Gestión Fuenlabrada donde, con 24 años, explotó: 10,8 puntos y 2,4 asistencias en apenas 18 minutos de juego motivaron que el club madrileño le convocara para ocupar el puesto, ya esta temporada, del campeón del mundo Sergio Rodríguez, emigrado a los Portland Trailblazers de la NBA. La irregular temporada del club madrileño –sin play off, pero con la participación en la Final Four de la Copa ULEB como mejor momento del curso- redujeron los números del linense Sánchez hasta 6,5 puntos, 2,4 asistencias y 0,8 robos en 17 minutos, aunque su predicamento entre los ojeadores de la NBA no mermó. La mejor prueba: la llamada de los Celtics que le llevará a luchar por un puesto en la mejor liga de baloncesto del planeta.

Sánchez se convertirá así en el séptimo español en probar suerte en una Liga de Verano de la NBA. Le precedieron Fernando Martín, José Miguel Antúnez, Tomás Jofresa, Rodrigo de la Fuente, Albert Miralles y Juanjo Triguero. Además, Alberto Herreros, Javier Mendiburu y Ferrán Martínez probaron suerte en entrenamientos específicos con Pacers, Bucks y Raptors, respectivamente. Solo cinco españoles han jugado en la NBA: Fernando Martín, Pau Gasol, Raúl López, José Manuel Calderón y Jorge Garbajosa.